No me gustaría, nada más, que el deporte adaptado, tenga la acogida que se se merece en el Perú. La realidad aquí, es que las personas con discapacidad destacan por sus propios medios, y entrenan con deportistas amigos, o profesores. Por lo que su mejora, depende de 'voluntades'. 

Vivimos en el Decenio de Las Personas con Discapacidad, y todavía no se ha hecho mucho, desde el deporte. Hay que gestionar políticas de desarrollo, en favor para este y no tan pequeño grupo de personas con discapacidad.

Por ejemplo, en el tema específico de los atletas invidentes, se necesitan de guías para los diversos trabajos en este campo, sin embargo, hasta el momento, no disponemos de entrenadores especializados, no se promueve la formación de guías, y todo ello contribuye hacia el desinterés de la misma persona con discapacidad.

Chile, tiene un campeón paralímpico en 5 mil metros planos, Christian Valenzuela. Este es un ejemplo claro de superación, ya que dicho país se encuentra en un proceso de descentralización, en favor del deporte adaptado.

Este es uno, de los tantos ejemplos de como países de nuestra región, logran resultados, cuando las personas e instituciones, muestran el interés de generar las condiciones propicias.